Colegio Obispado de León. Escuela de Posgrado

Las primeras noticias que se tienen de la ubicación y dimensiones de la parcela en la que se situó el Colegio datan de 1576: se trata del Libro de los Censos del Colegio de San Ildefonso.

Francisco Trujillo, natural de Sigüenza y Obispo de León, antiguo colegial de San Ildefonso, canónigo de la Iglesia Magistral y hombre importante en el Concilio de Trento, fundó este Colegio el dos de enero de 1586 con el fin de proporcionar alojamiento y alimentos durante ocho años a seis estudiantes pobres de Artes y Teología que tuvieran menos de cien ducados de renta al año. El Abad de la Magistral era su patrón. Las seis becas se repartían de la siguiente manera: una para el estudiante del obispado de León, otra para alguien nacido en el obispado de Sigüenza, y las cuatro restantes para estudiantes nacidos en Castilla La Vieja. En 1780 M. Rojas lo incorpora al Colegio de Málaga, cesando su función como Colegio docente en 1836 y suprimiéndose en 1843: la falta de control en las cuantiosas rentas dejadas por Francisco Trujillo, hizo que el sostenimiento del Colegio se hiciera dificultoso: ni el edificio fue terminado, ni el número de estudiantes llegó a completarse, de modo que la Fundación fue languideciendo hasta desaparecer. A finales del Siglo XIX pasa por las manos de diversas familias. El edificio estaba situado en la Calle Mayor en la confluencia con la calle de la imprenta (hoy Antonio Nebrija), haciendo esquina, y su prolongación natural hacia el sur era la calle de San Francisco. Las medidas de la parcela en que se situó el edificio eran de 40 pies de fachada y 182 pies de fondo.